Para muchos administradores de redes de todo el mundo, IPv6 ya no es un asunto perteneciente al futuro; ha dejado de ser algo de lo que se lleva años hablando, pero sin repercusión en el mundo real. Para muchos, IPv6 es una realidad, o bien su implementación se ha hecho un hueco en sus agendas: tienen que empezar a tenerlo en cuenta en su planificación de la red si no lo han hecho ya. La migración a IPv6 tiene importantes implicaciones para el diseño de su red. Dado que los servicios de DDI son fundamentales para cualquier red, deberían ser una de las primeras cosas que los administradores de red preparasen para la transición a IPv6.
Con IPv6, el DDI pasa de quebradero de cabeza a pesadilla
Si es una de esas muchas personas para las que IPv6 es el presente y no el futuro, probablemente ya conozca los problemas y los quebraderos de cabeza que supone una DDI compatible con IPv6. A efectos prácticos, las direcciones IPv6 no están pensadas para las personas, ni son fáciles de recordar. Tienen la forma: x:x:x:x:x:x:x:x, donde ‘x’ es un valor que puede tener de cero a cuatro dígitos hexadecimales. Por ejemplo: 2620:0:2ef0:7040:250:60ff:fe03:32b9 Dicho esto, la lista de problemas es larga:
- El formato y la longitud de las direcciones IPv6 difieren de unas a otras. Esta sintaxis complicada hará imposible gestionar el espacio de direcciones IP mediante una simple hoja de cálculo.
- Los límites de las direcciones IPv6 son mucho más difíciles de manejar.
- Puede que estén activos simultáneamente DHCPv6 y la configuración automática sin estado, lo que conduce a que los hosts obtengan dos direcciones; tres, si se utilizan las extensiones de privacidad.
- Trasladar su red IPv6 a la lógica del negocio va a ser una lucha.
- La mayoría de las redes se migran a IPv6 por fases, comenzando con una pila de estructura doble (IPv4 e IPv6).
- Así, todos los dispositivos de la red tendrán al menos dos direcciones IP: IPv4 e IPv6.
- Para ello necesitará dos servidores DHCP independientes: DHCPv4 y DHCPv6.
Las soluciones de gestión de DDI lo hacen posible
La complejidad adicional para el DDI al migrar a IPv6 puede ser aterradora. Las aplicaciones DDI equipadas para manejar los entornos IPv6 y de pila doble IPv4/IPv6 facilitan la transición y hacen que la administración de espacios IP grandes y complejos sea más sencilla, lo que ahorra tiempo y dinero. Incluso sería más correcto decir que no se limitan a facilitarla: sencillamente, no se puede implementar con éxito IPv6 (ya sean con doble pila o en redes totalmente IPv6) sin una solución de administración DDI pensada para IPv6. Mientras que con una, es posible:
- Aumentar el espacio IP disponible.
- Planificar desde cero sus direcciones IP o reorganizar su infraestructura de red.
- Integrar subredes IPv6 en grupos de direcciones IP existentes para una migración fluida de los datos, con la garantía de una convivencia sin riesgos de IPv4 e IPv6.
- Realizar un seguimiento de hosts IPv6 y de doble pila a través de DNS.
- Simplificar la asignación de direcciones IPv6 fijas y dinámicas, subredes y ajustes de clientes.
- Descubrir las direcciones IPv6 en uso.
- Automatizar las tareas administrativas complejas relacionadas con IPv6, DNS y DHCPv6, con la consiguiente eliminación de los riesgos de una mala configuración, además de garantizar la consistencia.
- Permitir que los administradores creen, dividan y unan redes IPv6.
- Racionalizar y mejorar el proceso de entrega de paquetes por IPv4.
- Mejorar el nivel de servicio a los usuarios finales.
- Aumentar los niveles de seguridad de la información.
- Trasladar su lógica de negocio a una infraestructura IPv6.