A menudo las organizaciones solo quieren solucionar su DNS externo por alguna de las siguientes razones:
- Sus sitios web y su correo electrónico dependen de ello, por lo que su principal objetivo es lograr que el servicio sea más seguro y fiable que ahora.
- Actualmente lo subcontratan y ya no están contentos con esa solución, pero realizar el trabajo internamente ha de ser fácil.
Sólido como una roca
Un ataque de DNS, un fallo de su servidor DNS o un simple error de configuración puede dejar desconectada a su organización. Cuando su presencia en la web es vital, tiene que eliminar ese riesgo. Por eso necesita una solución de DNS externo sólida como una roca:
- Segura: que minimice el riesgo de un ataque de DNS y de la pérdida de datos.
- Robusta: que proteja su DNS contra fallos en el servicio.
- Servidores de alta fiabilidad.
- Una arquitectura de DNS redundante.
Y quiere obtener todo esto con la máxima facilidad posible:
- Como mucha gente, puede que tenga poca administración de DNS que hacer; pocas zonas y direcciones IP, datos estáticos. Quiere por tanto una solución que pueda configurar y olvidarse de ella.
- O puede que tenga un montón de trabajo de administración de DNS; tal vez cientos de sitios web con cambios de DNS frecuentes. Por eso también necesita que la edición de datos de DNS sea fácil. Si tiene una gran cantidad de datos, puede que también le interese la IPAM.
Si depende actualmente de servidores de propósito general o virtuales, tal vez con BIND o DNS de Windows, los appliances DDI erradicarán los riesgos de su DNS externo. Lo ideal son soluciones como DNSBOX, con opciones centradas en la gestión de DNS y robustas en cuanto a seguridad, fiabilidad y redundancia.
Llévelo internamente
Si actualmente subcontrata el servicio de su DNS externo, tal vez a un ISP, sus problemas típicos se relacionan con el control, la calidad del servicio y el coste:
- Cada vez que desea realizar un cambio en uno de sus registros de DNS, tiene que hacer cola con los demás clientes.
- Su proveedor no puede asegurarle el nivel de rendimiento que precisa.
- No puede garantizarle tampoco el nivel de seguridad que necesita.
- Está limitado por las reglas de su ISP: no puede personalizar y ampliar el servicio.
- Sumando los costes a lo largo del tiempo, se da cuenta de que sale caro comparado con si lo llevara usted mismo.
Pero para decidir hacerlo internamente, tiene que ser fácil. Quiere reducir al mínimo la curva de aprendizaje, la carga de trabajo y los quebraderos de cabeza. Los appliances DDI le ayudarán con esto. Los más adecuados son como DNSBOX:
- Es sólido como una roca.
- Incluye opciones centradas específicamente en el DNS.
- Es sencillo, de modo que es especialmente fácil de aprender y de utilizar.
- Cuesta menos, con lo que realizar el trabajo internamente juega económicamente a su favor.