Al transmitir páginas web a sus usuarios desde un caché web local, usted debe extraer menos datos de Internet, lo que le ahorra ancho de banda y dinero.
Con cachés inteligentes como CACHEBOX, esto también se aplica al contenido de video y aprendizaje interactivo que sus maestros quieren usar más en el salón de clases. También se aplica a actualizaciones de software, que pueden agotar su ancho de banda cuando todos los dispositivos en su laboratorio de computación se están actualizando.
Los ahorros en ancho de banda se traducen en dinero de distintas formas en distintas organizaciones:
- No es necesario actualizar a una conexión de mayor ancho de banda
- Ahorros de costos directos en conexiones con medición: menor tráfico de datos = facturas más bajas
- Capacidad de poder manejar más usuarios (quizás para un esquema 1:1), sin aumentar la capacidad
La cantidad de ancho de banda que se ahorra con el almacenamiento en caché varía según el contexto. La mayoría de las escuelas y autoridades educativas percibe ahorros por encima del 35% según la composición del tráfico en su red.
Aprovechar mejor su ancho de banda existente, y el dinero ahorrado como resultado, es el principal motivo para usar un caché en muchos casos. A menudo, un sencillo cálculo de la rentabilidad de la inversión muestra una rápida amortización y hace que no haya que pensar dos veces la decisión.